Marruecos en Moto V - LAS RUTAS Y EL LUGAR
En el apartado de las rutas viene lo
complicado, cuando vas por un sitio que no conoces… No sabes que carreteras debes coger o no, el estado de estas carreteras, si pasas algún sitio complicado o dejas de lado otro de obligada visita... En esto es conveniente apoyarse en experiencias de otros viajeros y leer foros. Después queda a la elección de cada uno el caso que se le quiera hacer, pero con información para decidir.
Yo metí al GPS todas las rutas (etapas del viaje) previstas que había diseñado, incluí toda la información de los puntos (Riads, ciudades,
etc) con coordenadas (en Marruecos lo del nombre de la calle, como no sea
principal, olvídate…). Siempre sujeto a cambios, pero lo mejor llevarlo
previsto (así lo suelo planificar siempre), incluso con rutas alternativas. Uno de los motivos de llevar el
portátil era el posible diseño de rutas sobre la marcha, aunque finalmente no fue necesario, ni siquiera tomar rutas alternativas.
Es importante tener en cuenta
que 200 kilómetros en Marruecos no son igual que en España, ni por autovía, ya de
carreteras ni hablamos. El GPS hace la estimación bastante bien, incluso a veces tardas algo más de tiempo de lo que indica. Nunca vayas con el tiempo justo, siempre
con margen, y procura no conducir de noche en Marruecos.
En cuanto a las carreteras, hay de todo un poco. Existen autovías/autopistas (peajes asequibles, a ojo, la mitad de precio que en España) en muy buen estado, carreteras buenas, y también carreteras secundarias más peligrosas, que soportan más tráfico y dónde puedes encontrarte sorpresas (camiones por tu carril, tramos de carretera sin asfaltar...). No es lo normal, pero hay que tenerlo en cuenta.
Mapa en papel también llevábamos, pero no llegamos a abrirle en ningún momento. A cambio llevábamos información de lugares a visitar de las ciudades (buscado por internet) y nos fue suficiente. No obstante, hasta en viajes por Europa, un mapa de papel ocupa poco y nunca falla, además te puede ofrecer una visión mejor que el GPS (con lo móviles actuales también dispones de todo esto, pero no es lo mismo, sigues dando mejor perspectiva el papel).
El idioma utilizado es árabe o francés. El español lo hablan sin problema en el norte, hasta Xauen y esa latitud, de ahí para abajo, nada. Inglés, prácticamente nada, salvo en Riads y hoteles. En las fronteras, depende el funcionario, pero al entrar no hablaban ni español ni inglés (gracias a la ayuda de un chico marroquí que viajaba en el ferry con nosotros y nos ayudó con la traducción, aunque no hubo ningún problema). En la salida, tampoco hablaban otro idioma, preguntaban si llevas cosas ilegales en español, pero nada más.
El tema de la policía, caso aparte. Llegábamos con el prejuicio de que eran corruptos y pesados, pero la experiencia ha sido la contraria. O bien las cosas han cambiado, o es que tuvimos la suerte de no toparnos con nada raro.
Como casos curiosos, destacar que unos policías nos ayudaron a acordar un precio en un parking por debajo de lo que nos pedían a nosotros (nos pedían 20€ y gracias a la mediación del policía se quedó en 4€ (tasa guiri)). Otro día paramos a comer junto a un control policial. Después de comer, revisamos un poco los vídeos y las fotos, y un policía se acercó muy educadamente, pidiendo que le enseñase lo que había grabado, pensando que podía ser el control policial el motivo de nuestras grabaciones. Al ver que no era así, amablemente se despidió (seguro que en España también te pedirían revisarlo si tienen la duda, es normal).
Hay que tener en cuenta, y mucho, los límites de velocidad, ya que hay miles de controles y radares (patrullas de policía con trípode o pistola-radar). Los controles rutinarios y de documentación están señalizados, debes aminorar la marcha al llegar a ellos y parar hasta que te dé paso el policía. A nosotros no nos pararon en ninguno, daba la impresión de que a los extranjeros no quieren molestarlos.
La gente es muy amable y hospitalaria. Hay algún “listillo”, como en España, en plan “gorrilla” que quiere sacar un euro, pero es una inmensa minoría. En ocasiones, cuando preguntas por un lugar, en lugar de indicarte, te llevaban o te acompañan (a veces por el camino largo, no sabíamos porqué), y no pedían nada a cambio. No encontramos niños revoloteando pidiendo dinero, ni gente pesada en el regateo, estas imágenes no las vimos.
Llegamos a la conclusión de no llevar cosas para los niños (bolis, pinturas, cuadernos que muchas veces llevan los turistas a Marruecos) porque consideramos que creaba una cultura de mendicidad. Luego vimos que acertamos cuando en la medinas había puestecillos que vencían estos productos que los Europeos llevaban para los niños. Los niños por la calle no pedían nada, estaban igual de escolarizados que en cualquier lugar España.
La gasolina, después de leer que era de baja calidad, que la moto andaba menos, que el precio era muy similar al español… etc, nos desengañamos. La calidad no lo sé, pero la moto andaba igual con gasolina española que con la sin plomo que echábamos allí (misma fuerza, mismo reprís). El precio, en España estaba la sin plomo 95 a 1,25€/litro aproximadamente, y en Marruecos a 9,9 dirhams/litro (al cambio aproximadamente a 0,9 €/litro). El consumo medio global del viaje fue de 5,9 litros a los 100 kilómetros, 2 personas, cargado y mucho, y velocidades legales. No obstante, para esa moto es un consumo alto que si puede estar relacionado con la calidad del combustible (condiciones similares en España puede ser un consumo medio que ronde los 5,5 litros a los 100).
Hay que tener cuidado con no apurar mucho el depósito por no quedarse tirado en la carretera. En autopistas hay gasolineras suficientes aunque no con tanto frecuencia como en España, pero en vías secundarías, el escenario es otro y a veces cuesta más encontrarlas, o incluso una vez que llegas a una puede suceder que estén desabastecidos de gasolina (esto nos pasó, y dimos gracias a que aún teníamos autonomía). El truco es fácil, si ves una gasolinera cuando llegas al medio depósito, llénalo.
Respecto al dinero, el cambio, también iba preocupado por lo que había leído. Comisiones altas, cambio de la gente cerca del puerto con menos comisión, estafas, etc…
Nosotros llegamos solo con euros y con tarjeta con lo que sacábamos dinero de los cajeros al precio actual sin comisión (por las condiciones particulares de la tarjeta, pero esto conviene saberlo antes de ir) y sin problemas. Hay cajeros, no tan abundantes como en España, pero encuentras en las ciudades.
En el norte hay algún sitio que aceptan euros, pero solo billetes. Los pagos con tarjeta no son habituales (ni siquiera en hoteles), hay muchos sitios que no la aceptan o que cobran comisión adicional si utilizas este medio de pago. Y cabe recordar que si pagas con euros, la conversión la hacen 1€ a 10 dirhams (realmente deberían darte 11 (valor del cambio en la época que estuvimos), por lo que pierdes unos 10 céntimos por cada euro, que no es una ruina, pero sales perdiendo).
Los desplazamientos los realizábamos siempre por la mañana pronto, aprovechando la temperatura más fresca, que no era tal, pero hacía menos calor, además de la luz. Las rutas eran de unos 180-300 km, ya que queríamos aprovechar también para hacer turismo, no solo moto. Es aconsejable siempre viajar de día (insisto en esto, pero si vas lo verás), de noche allí es una locura. Y viajando de mañana tienes la ventaja de llegar a las ciudades de mañana o mediodía, cuando el tráfico aún es tranquilo (especialmente si vais al centro de ciudades grandes).
Una vez en la ciudad, buscábamos aparcamiento vigilado cerca del Riad. Normalmente son descampados habilitados con una o dos personas que pasan el día allí. La primera vez que dejas la moto, no te quedas tranquilo (acostumbrados a España), pero puedo asegurar que la moto ni la tocan, si la dejas 2 días, la encuentras tal y como la dejaste. El precio puede variar, pero para una moto, nosotros no pagamos más de 40 dirhams por 2 días (unos 2 euros al día). En ocasiones piden más, hasta 20 euros al día (tasa guiri).
Para moverte por las ciudades, por la medina, andando, y si quieres desplazarte más, lo mejor es un taxi (por unos 25 dirhams (2,5€) atraviesas una ciudad entera). Hay que tener en cuenta que igual se te montan más personas en el taxi, allí funciona así. En ciudades como Rabat, además, puedes usar el tranvía, rápido y barato. Nosotros utilizamos taxi en Fez para desplazarnos hasta la zona europea que nos habían hablado de ella, y para hacer una visita a unas personas en las afueras de la ciudad.
Mapa en papel también llevábamos, pero no llegamos a abrirle en ningún momento. A cambio llevábamos información de lugares a visitar de las ciudades (buscado por internet) y nos fue suficiente. No obstante, hasta en viajes por Europa, un mapa de papel ocupa poco y nunca falla, además te puede ofrecer una visión mejor que el GPS (con lo móviles actuales también dispones de todo esto, pero no es lo mismo, sigues dando mejor perspectiva el papel).
El idioma utilizado es árabe o francés. El español lo hablan sin problema en el norte, hasta Xauen y esa latitud, de ahí para abajo, nada. Inglés, prácticamente nada, salvo en Riads y hoteles. En las fronteras, depende el funcionario, pero al entrar no hablaban ni español ni inglés (gracias a la ayuda de un chico marroquí que viajaba en el ferry con nosotros y nos ayudó con la traducción, aunque no hubo ningún problema). En la salida, tampoco hablaban otro idioma, preguntaban si llevas cosas ilegales en español, pero nada más.
El tema de la policía, caso aparte. Llegábamos con el prejuicio de que eran corruptos y pesados, pero la experiencia ha sido la contraria. O bien las cosas han cambiado, o es que tuvimos la suerte de no toparnos con nada raro.
Como casos curiosos, destacar que unos policías nos ayudaron a acordar un precio en un parking por debajo de lo que nos pedían a nosotros (nos pedían 20€ y gracias a la mediación del policía se quedó en 4€ (tasa guiri)). Otro día paramos a comer junto a un control policial. Después de comer, revisamos un poco los vídeos y las fotos, y un policía se acercó muy educadamente, pidiendo que le enseñase lo que había grabado, pensando que podía ser el control policial el motivo de nuestras grabaciones. Al ver que no era así, amablemente se despidió (seguro que en España también te pedirían revisarlo si tienen la duda, es normal).
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| La moto en el lugar dónde paramos a comer y estaba montado el control Como podéis ver, no teníamos interés en fotografiar el control |
Hay que tener en cuenta, y mucho, los límites de velocidad, ya que hay miles de controles y radares (patrullas de policía con trípode o pistola-radar). Los controles rutinarios y de documentación están señalizados, debes aminorar la marcha al llegar a ellos y parar hasta que te dé paso el policía. A nosotros no nos pararon en ninguno, daba la impresión de que a los extranjeros no quieren molestarlos.
La gente es muy amable y hospitalaria. Hay algún “listillo”, como en España, en plan “gorrilla” que quiere sacar un euro, pero es una inmensa minoría. En ocasiones, cuando preguntas por un lugar, en lugar de indicarte, te llevaban o te acompañan (a veces por el camino largo, no sabíamos porqué), y no pedían nada a cambio. No encontramos niños revoloteando pidiendo dinero, ni gente pesada en el regateo, estas imágenes no las vimos.
Llegamos a la conclusión de no llevar cosas para los niños (bolis, pinturas, cuadernos que muchas veces llevan los turistas a Marruecos) porque consideramos que creaba una cultura de mendicidad. Luego vimos que acertamos cuando en la medinas había puestecillos que vencían estos productos que los Europeos llevaban para los niños. Los niños por la calle no pedían nada, estaban igual de escolarizados que en cualquier lugar España.
La gasolina, después de leer que era de baja calidad, que la moto andaba menos, que el precio era muy similar al español… etc, nos desengañamos. La calidad no lo sé, pero la moto andaba igual con gasolina española que con la sin plomo que echábamos allí (misma fuerza, mismo reprís). El precio, en España estaba la sin plomo 95 a 1,25€/litro aproximadamente, y en Marruecos a 9,9 dirhams/litro (al cambio aproximadamente a 0,9 €/litro). El consumo medio global del viaje fue de 5,9 litros a los 100 kilómetros, 2 personas, cargado y mucho, y velocidades legales. No obstante, para esa moto es un consumo alto que si puede estar relacionado con la calidad del combustible (condiciones similares en España puede ser un consumo medio que ronde los 5,5 litros a los 100).
Hay que tener cuidado con no apurar mucho el depósito por no quedarse tirado en la carretera. En autopistas hay gasolineras suficientes aunque no con tanto frecuencia como en España, pero en vías secundarías, el escenario es otro y a veces cuesta más encontrarlas, o incluso una vez que llegas a una puede suceder que estén desabastecidos de gasolina (esto nos pasó, y dimos gracias a que aún teníamos autonomía). El truco es fácil, si ves una gasolinera cuando llegas al medio depósito, llénalo.
Respecto al dinero, el cambio, también iba preocupado por lo que había leído. Comisiones altas, cambio de la gente cerca del puerto con menos comisión, estafas, etc…
Nosotros llegamos solo con euros y con tarjeta con lo que sacábamos dinero de los cajeros al precio actual sin comisión (por las condiciones particulares de la tarjeta, pero esto conviene saberlo antes de ir) y sin problemas. Hay cajeros, no tan abundantes como en España, pero encuentras en las ciudades.
En el norte hay algún sitio que aceptan euros, pero solo billetes. Los pagos con tarjeta no son habituales (ni siquiera en hoteles), hay muchos sitios que no la aceptan o que cobran comisión adicional si utilizas este medio de pago. Y cabe recordar que si pagas con euros, la conversión la hacen 1€ a 10 dirhams (realmente deberían darte 11 (valor del cambio en la época que estuvimos), por lo que pierdes unos 10 céntimos por cada euro, que no es una ruina, pero sales perdiendo).
Los desplazamientos los realizábamos siempre por la mañana pronto, aprovechando la temperatura más fresca, que no era tal, pero hacía menos calor, además de la luz. Las rutas eran de unos 180-300 km, ya que queríamos aprovechar también para hacer turismo, no solo moto. Es aconsejable siempre viajar de día (insisto en esto, pero si vas lo verás), de noche allí es una locura. Y viajando de mañana tienes la ventaja de llegar a las ciudades de mañana o mediodía, cuando el tráfico aún es tranquilo (especialmente si vais al centro de ciudades grandes).
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| El parking vigilado de Fez, en esta caso eran unos 2€ al día. |
Una vez en la ciudad, buscábamos aparcamiento vigilado cerca del Riad. Normalmente son descampados habilitados con una o dos personas que pasan el día allí. La primera vez que dejas la moto, no te quedas tranquilo (acostumbrados a España), pero puedo asegurar que la moto ni la tocan, si la dejas 2 días, la encuentras tal y como la dejaste. El precio puede variar, pero para una moto, nosotros no pagamos más de 40 dirhams por 2 días (unos 2 euros al día). En ocasiones piden más, hasta 20 euros al día (tasa guiri).
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| La moto en el primer parking de Xauen. 2€ al día vigilada, pero al primer impacto daba miedo dejarla ahí, y resulto siendo lo más seguro. |
Para moverte por las ciudades, por la medina, andando, y si quieres desplazarte más, lo mejor es un taxi (por unos 25 dirhams (2,5€) atraviesas una ciudad entera). Hay que tener en cuenta que igual se te montan más personas en el taxi, allí funciona así. En ciudades como Rabat, además, puedes usar el tranvía, rápido y barato. Nosotros utilizamos taxi en Fez para desplazarnos hasta la zona europea que nos habían hablado de ella, y para hacer una visita a unas personas en las afueras de la ciudad.
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